Como el día

No voy a negar que últimamente me encuentro como el día...lluviosa y gris.

Solo hay que mirar a través de la ventana para ver el mundo en el que vivimos y sentir impotencia al no poder atravesar el cristal y pintar un escenario mejor...y claro, este estado de ánimo hace que todo lo vea gris/negro.

Hoy he recordado un sentimiento que tenía cada día cuando era pequeña...creo que ya hace alrededor de 8 años que mi perrita murió,...recuerdo que cada mañana antes de ir al instituto la sacaba a la calle y mientras paseábamos, yo observaba un jardin estupendo que tienen mis padres justo frente al bloque en el que viven allí en Sevilla,...a esas horas tempranas del día los pájaros cantaban y había paz en la calle.

Siempre me ha llamado mucho la atención la expresión de "ese muchacho/a es un mirlo blanco" (dícese de aquellas personas, o aquello en general, que es extraordinaro, ya que los mirlos blancos no existen, todos son negros o marrones) pues siempre he pensado: - ¿Y qué pasa con los demás mirlos? también son bonitos, no porque sean iguales van a ser menos especiales-. Y a partir de que escuché esta frase por primera vez, y me forjé mi opinión personal, cada vez que veía un mirlo por la mañana (y era muy a menudo)auguraba un día estupendo y me invadía una sensación que me hacía sonreir.

Hoy, a pesar de la lluvia, he visto un mirlo negro y he sonreído...quizás sea un buen momento para luchar contra esa sensación de hastío.