Un instante

Casi apenas tengo un instante para actualizar el blog, llevo una semana que no paro haciendo mil cosas de mi "monotema"...ya sabéis, la boda.

En esta semana le hemos dado un buen empujón y prácticamente ya está todo concretado :)

Lo que me ha resultado curioso y me ha hecho escribir aquí, ha sido un sueño...esta noche he soñado, sí. Suelen decir que todas las noches se sueña pese a que no nos acordemos, y bueno, hay veces que es así, mi mente no para ni durmiendo. Pero hoy sí me acuerdo y además, aún tengo la sensación con la que me he levantado...una mezcla de paz y fuerza interior algo extrañas.

Si logro poner en pie un poco el escenario completo, os admitiré que todo va influído por el día de hoy [esta tarde comienza mi despedida de soltera], y ahí estaba yo, mi hermana y muchas chicas, en mi despedida de soltera...yo me he inventado (porque no tengo ni idea de qué se va a hacer) que era en un sitio de aeroplanos, recuerdo un balcón desde el que veia como aviones en los que se supone que íbamos a montarnos nosotras, planeaban a lo largo de una montaña cubierta de arboleda y aterrizaban más abajo en un mini aeropuerto (los aeroplanos sin motor, solo planeaban)...todas estaban emocionadas y yo...cagada.

A continuación (cosa que pasa en los sueños, generalmente sin sentido) recuerdo una playa enorme, estábamos de noche y había montada una especie de jaima blanca preciosa, y todas estábamos dentro, nos impartían una "clase" de cómo lograr controlar nuestra mente y dominar los pensamientos y las acciones de otros seres vivos (personas, animales...). Recuerdo, como si lo viera ahora mismo, un chico que llegó con tres camellos, se bajó de uno de ellos, los miró e hizo que se sentaran los tres a la vez (con la mente, se supone).

Yo me lo creía fielmente y salí de la jaima convencida de que podía hacerlo, recuerdo que estaba Felisa conmigo, embarazada (al menos de 8 meses) y yo le contaba todo lo que había aprendido, ella me miraba incrédula, y yo le decía: "mira, verás, estoy practicando, te lo demostraré"; a nuestro lado un chico estaba diciendo: "qué frio hace esta noche, qué humedad"...y a continuación yo lo miraba y pensaba: "voy a bañarme, voy a bañarme, voy a bañarme"-  y el chico dijo: "voy a bañarme!" - se desnudó y se lanzó al mar.

Yo me sentí colmada de satisfacción y capaz de hacer cualquier cosa...

Pero después varias anécdotas de estas más (no es plan de escribir un mega-post ilegible), en la última "clase", nos dijeron unas palabras que se me han quedado clavadas en mi mente y que yo, de nuevo, le repetí a mi amiga Felisa tocándole la tripita de embarazada...la frase era:

"El fin último y fundamental de la vida del ser humano es vivir para DAR VIDA. Intentaréis perderos en disfrutar de la vida comiendo, bebiendo, viajando,...pero no os sentiréis plenamente vivos hasta que no déis vida".

Me pregunto...¿qué querrá decirme mi subconsciente?